sábado, 11 de febrero de 2012

ENTRE PREFERENTES Y SUBORDINADAS

ENTRE PREFERENTES Y SUBORDINADAS

Es curioso lo que ocurre algunos días. Hoy por ejemplo he tenido varias consultas relativas a un mismo asunto. Se trata de un problema que tienen algunos inversores, pequeños inversores en su gran mayoría. Muchos de ellos jubilados que pusieron el dinero en un supuesto depósito  bancario, que podrían rescatar en cualquier momento.
Pero la gran sorpresa es que cuando han ido a rescatarlo no ha sido posible. Se han encontrado entrampados por un engaño de las entidades financieras en las que confiaban.
Tras mucho batallar (el asunto lleva coleando varios años) ahora les ofrecen un canje. Cambiar el producto financiero que tenian por otro de diferentes caracteríticas. Lo curioso del caso es que venian a que les aclaráramos tanto el producto del que eran poseedores como del nuevo.
Se trata de dos productos financieros llamados híbridos, que tienen tanto características de acciones como de deuda. Esstamos hablando de las participaciones preferentes y de las obligaciones subordinadas.
Estas personas eran poseedores de unas participaciones preferentes de una entidad cuando en su día creyeron contratar un depósito a plazo. Pero por las características de este producto no podían desprenderse de estas, ni siquiera en un mercado llamado secundario.
Pero por que fiarse de una entidad que les había provocado ese problema?
Por que acudir a un canje de esas participaciones por unas obligaciones subordinadas?
No nos volverán a engañar?
Aparte de responder a estas preguntas he tenido que explicar lo que son estos productos financieros. Había que ver la cara que ponian ante las explicaciones que entendían con gran dificultad pero gran atención. Finalmente hemos expuesto la situación en la que se encontraban al comienzo y en la que se encontrarían si acudían al canje. No había muchas dudas sobre que opción les convenía. Ellos mismos han tomado la decisión. Esta coincidía con la que yo hubiese tomado.
De todas las maneras siguen con un problema, tienen un producto que no querían. Un producto que no se parece al que creían haber contratado. Tampoco pueden acceder a SU dinero.
A las entidades financieras y a las perssonas que allítrabajan eso parece preocuparles bastante poco. Sacaron esos productos para conseguir tener unos ratios que cumpliera los requisitos del Banco de España. También han cobrado los incentivos por vender dichos productos, mientrass que estos abueletes siguen sufriendo.
El día que se piense más en el cliente que en el propio ombligo tendremos solucionados muchos de nuestros problemas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario