lunes, 20 de abril de 2020

EUROPA, MÁS EUROPA

EUROPA, MÁS EUROPA

Leo con tristeza, que gran parte de los materiales y equipos que se van a utilizar en intentar superar la pandemia que sufrimos vienen del exterior, fruto de una globalización de la economía, en su gran mayoría de China.

Esta dependencia del exterior nos señala la debilidad de un territorio cuando un acontecimiento extraordinario sucede. Nos referimos a la fabricación en el exterior y al posterior aprovisionamiento. Se está visionando que las decisiones hay que empezar a tomarlas no solo por costes, sino desde un punto de vista estratégico.

Sin embargo, me alegra ver iniciativas para resolver la carencia de las mercancías que han de llegar del exterior. Por un lado, las iniciativas solidarias que han surgido son muestra de una sociedad con  iniciativa. En este sentido, cabría señalar a las personas que desinteresadamente está confeccionando mascarillas, al movimiento Maker  fabricando viseras protectoras, y a otras tantas de distintos sectores. Por otro lado, están todas aquellas empresas que han modificado su actividad principal para realizar, de forma innovadora, lo que no acaba de llegar del exterior. Ver a empresas del sector textil realizar mascarillas sanitarias, a empresas de automoción equipos sanitarios como los respiradores,... son indicios de que se puede fabricar, se puede innovar...

El punto de vista estratégico, la no excesiva dependencia del exterior está propiciando un cambio de mentalidad sobre el aprovisionamiento, sobre el consumo,... cogiendo fuerza la idea de consumo de cercanía, el llamado km 0.

En este sentido vemos que Europa está obligada a un cambio y reivindicar la producción propia, para no depender de ningún bloque, ni de China ni de EEUU.

Es la hora de que Europa invierta en sectores estratégicos y pueda competir con los dos países que se están disputando el liderazgo mundial. Necesitamos en Europa una operadora telefónica potente que compita con Huawey,  plataformas tecnológicas, un eurofacebook, una plataforma de distribución como Amazon europeo, fabricas de semiconductores, astilleros que compitan con Corea, acerías para no depender de China,... En definitiva una estrategia europea.

Algunos solamente hablan de costes de producción y rentabilidad, sin embargo a esa ecuación habría que añadirle el componente estratégico. Esto supondría tener una estrategia europea por un territorio que puede subsistir sin depender de otras zonas, aunque ocurran acontecimientos como los presentes.
Es difícil, lo sabemos, pero si se consiguió en el sector aeroespacial con Airbus, es posible en otros muchos. Solo hay que proponérselo. Solo eso, más Europa.